Running: mejorar velocidad y resistencia

Existen recomendaciones que son pertinentes para cualquier tipo de corredor, independientemente si se trata de un velocista o un fondista. Otros consejos, en cambio, han de referirse a actividades atléticas bien definidas. En lo siguiente mencionaremos dos sugerencias de este último tipo.

Primero mencionaremos algunas pautas para alcanzar la máxima velocidad en un sprint y después, mencionaremos algunas claves para afrontar las cuestas, en especial para quienes prefieren carreras a campo a través.

Uno de los propósitos más importantes que debe tener un corredor es el de llegar a la meta. También es determinante el deseo de disminuir el tiempo en el cual se completa tal recorrido. La velocidad que se le imprima al ritmo de carrera es determinante para mejorar un tiempo registrado.

Para aumentar la velocidad es imprescindible incrementar la fuerza. Los atletas más veloces son quienes exhiben una fuerte y vigorosa constitución física. Para conseguir esto último, además de entrenamientos de resistencia, es indispensable desarrollar ejercicios con pesas, sentadillas y carreras sobre cuestas. Con el paso del tiempo, entrenando con constancia, el aumento de fuerza en el cuerpo del corredor derivará en mayor velocidad y competitividad.

Cómo entrenar en cuestas

Hemos mencionado la importancia que tiene correr sobre cuestas para aumentar la velocidad de un corredor. Sin embargo, entrenar en este tipo de terreno requiere de ciertas precauciones. Por ejemplo, en las cuestas no siempre es lo mejor subir corriendo, en especial en las competiciones de montaña. Lo mejor es ascender las cuestas caminando, tomando impulso con las manos en las rodillas para tener un apoyo más firme y evitar lesiones.

El tiempo que nos tome dejar de correr al subir una cuesta, se puede recuperar sin problemas en la bajada. Pero esto último precisa de un entrenamiento especializado, ponderando el trabajo en tobillos y articulaciones con el objetivo de fortalecerlos. Uno de los errores más frecuentes que cometen los corredores principiantes, es desarrollar entrenamientos pedestres, dejando de lado el trabajo en gimnasio. Tal omisión puede ser causa de graves lesiones. Para adaptarse a las carreras de montaña es necesario dejar los caminos y correr sobre diferentes clases de terreno, así como también desarrollar ejercicios técnicos y entrenamientos de cuestas.

No obstante lo mejor es no arriesgarse. Si en el marco de una carrera se debe efectuar un descenso técnico, y no se cuenta con la experiencia suficiente, hay que hacerlo despacio y ayudándose de los brazos, para así mejorar el equilibrio y evitar las caídas.

Califica este artículo

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (Ninguna valoración todavía)
Cargando…